Los habitantes de los cuarteles de Sant Andreu nos hemos reunido tras conocer la sentencia del juicio por desahucio contra nosotros. Hemos decidido recurrir la sentencia por las siguientes razones:

1.- Consideramos que en el proceso judicial no se dieron todas las garantías para una adecuada defensa de nuestros intereses. Cerca de 600 inmigrantes reclamaron su presencia durante el juicio, consiguieron abogado y procurador de oficio y se personaron en la causa, ninguno de ellos pudo testificar en la Sala, muchos no tuvieron tiempo ni de entrevistarse con su abogado.

2.- La ejecución de la sentencia en las actuales circunstancias nos obligaría a las más de 200 personas que continuamos residiendo en los cuarteles a vivir en la calle. Situación extremadamente grave en las fechas actuales en que arrecian las lluvias y la llegada del invierno se hace patente.

Ante la llegada de la sentencia, las Administraciones han vuelto a repetir en los medios de prensa que existe un plan de realojo para todos los habitantes de los cuarteles. Queremos decir bien claro que ese plan no ha existido hasta la fecha. Durante los últimos meses, el plan de las administraciones solo se ha traducido en el acoso policial y la deportación de cerca de 250 inmigrantes que residían en los cuarteles.

Por otra parte, la atención individual de la Cruz Roja es absolutamente insuficiente como lo demuestra que numerosas personas realojadas, incluso familias con niños pequeños, se han visto obligadas a volver a los cuarteles ante el final del realojo y la llegada del invierno.

Si las administraciones tienen un plan de realojo, que lo hagan público, que lo comuniquen a sus destinatarios: los habitantes de los cuarteles. Hoy solamente se nos conmina a abandonar pacíficamente los cuarteles cuando probablemente se esté preparando un dispositivo policial para arrojarnos violentamente a la calle.

Las personas que habitamos los cuarteles lo hacemos simplemente porque no tenemos, ni nadie nos ha ofrecido, otro lugar a donde ir. Reclamamos un realojo para todos nosotros sin distinción de raza, procedencia o situación legal; un realojo que habría de alcanzar al menos hasta el final del invierno y las adversas condiciones climáticas; un realojo en condiciones que permitiese a las personas buscar un trabajo con el que subsistir y regularizar su situación.

Solo por ese camino y no por el de la actuación judicial y el acoso policial, se podrá encontrar una solución para la grave situación que hoy vivimos los habitantes de los cuarteles.

Asamblea de habitantes de los cuarteles de Sant Andreu 18/10/2003